Rocas del Masmut
- Distancia: 7,6 km (ida y vuelta)
- Desnivel: 256 m
- Duración: 1h 50min
Todos los pueblos del Matarraña tienen un encanto especial y Pena-Roja no es una excepción. Construida en lo alto de una colina, sus calles empinadas y estrechas siguen la orografía del terreno. La iglesia de Santa María es el monumento más importante. Desde mediados del siglo XVIII se mezclan los estilos renacentista y barroco. La historia se aprecia en las piedras de los edificios más antiguos. Los restos del castillo que coronan la Mola, el edificio del Ayuntamiento (s. XVI) o la Lonja (s. XVI), son un ejemplo.
Saldremos por la parte alta del pueblo y, mientras comenzamos a caminar, vamos descubriendo un paisaje abrupto formado por barrancos donde crecen pinos, encinas y plantas aromáticas. Nuestro camino (una pista forestal en buen estado) discurre a través de un camino utilizado por los rebaños de ovejas para trasladarse.
Muros de piedra seca
Al fondo del paisaje se vislumbran las rocas del Masmut, nuestro objetivo. En el barranco que se abre a la izquierda, hay signos evidentes de su uso como tierras de cultivo. Las paredes de piedra seca, ahora un poco desgastadas, se utilizaban para distribuir la tierra en terrazas y hacerla más rentable.
Después de unos kilómetros, llegamos a una pequeña área de descanso. El Panel informativo explica cosas muy curiosas y muy interesantes sobre las aves carroñeras. Entre ellas su función de limpieza del medio ambiente que, al alimentarse de animales muertos, evitar la propagación de las enfermedades. ¿Sabías que un buitre puede comer hasta un 20% de su peso corporal y puede después pasar un par de semanas sin comer nada?
Un poco más arriba llegamos al mirador de las rocas. Una plataforma de piedra donde se puede disfrutar de una magnífica vista. Un panel nos informa de una serie de curiosidades acerca de esta impresionante piedra caliza de formas redondeadas en la que viven buitres y aguiluchos, entre otras aves.
Nombre bereber
Probablemente el nombre de Pena-roja provenga del color rojizo de las rocas del Masmut. El topónimo "Masmut" parece que haga referencia al pueblo bereber de los masmuda que tal vez se asentaron en esta zona durante el dominio musulmán. Con una altura máxima de 1.058 m y paredes verticales de más de un centenar de metros, por su interés ecológico y belleza natural, las rocas del Masmut están clasificadas como LIC (lugar de interés comunitario).